Anduvimos en el mismo río
Un faro era nuestro compañero
Destellos a lo lejos quebraron el bote
La luz del faro ya no brillaba

El río llegaba a destino
La inmensidad del mar aterraba y también encantaba
Ahora eran dos faros
Uno para ti
y otro para mí
Tú encontraste tu bote
Lo nombraste tierra
Y a mi bote lo nombré alma
Tú necesitabas remar en el mundo
Y yo en el cielo
Con otra pasión y otro remo
Ahora tu faro brilla
y también el mío.
No hay comentarios:
Publicar un comentario